Un rascacielos humano

Gheorghe Mureşan tiene el record de altura en la NBA. El rumano nacido en 1971 mide 2,32 metros y supera por apenas milímetros al sudanes Manute Bol. El pívot estuvo seis años en la competencia y logró ser el Most Improved Player (Jugador Más Mejorado de la NBA) de la temporada 1995/96.

"Ghiţă" fue seleccionado en 1993 por los Washington Bullets. En esta franquicia disputó cuatro torneos con un promedio de 10.3 puntos y 6.0 rebotes por encuentro. También jugó en New Jersey Nets pero su nivel no fue el mismo que el de años anteriores. Con tan solo 31 partidos en dos años el equipo le rompió el contrato y lo borró de la NBA.

Era un jugador con muchas cualidades y al que se le esperaba un gran paso en la competición americana. Pero no todo es color de rosas y las lesiones le jugaron una mala pasada. Siempre tuvo un gran nivel pero a la vez limitado por sus problemas en sus piernas.

Tras retirarse de la NBA en el 2000, Mureşan estuvo tres temporadas en la Liga de Francia precisamente en el Pau-Orthez. También formó parte de los Maryland Nighthawks de la ABA pero no llegó a jugar más de una temporada.

En la temporada 1993/94 el rumano formó parte de los Bullets junto con Manute Bol, eran los dos jugadores más altos de NBA. A diferencia de Bol, el enorme tamaño de Muresan es resultado de la acromegalia, desorden de la glándula pituitaria. Tanto su padre como su madre son de estatura normal.

Aquí un vídeo de la noche en la que Mureşan anotó 27 puntos frente a los Bulls de Jordan.